(Foto: Olé)
lunes, 8 de septiembre de 2014
domingo, 7 de septiembre de 2014
RECONOCIMIENTO MONUMENTAL
En la previa del encuentro contra Tigre, el club aprovechó la ocación para rendir un reconocimieto al NIETO recuperado 114, Ignacio Guido Montoya Carlotto.
“Estoy emocionado. Este homenaje no es para mí, es para la búsqueda de las abuelas. Espero que sirva para instar a los que tengan dudas sobre su identidad, que vayan y busquen”, destacó Guido, quien contó además con la presencia de su abuela (y titular de la fundación Abuelas de Plaza de Mayo) Estela de Carlotto y el presidente de River, Rodolfo D´onofrio, entre otros, quien le entregó una camiseta con el número 114 en la espalda.
En la previa del encuentro contra Tigre, el club aprovechó la ocación para rendir un reconocimieto al NIETO recuperado 114, Ignacio Guido Montoya Carlotto.
“Estoy emocionado. Este homenaje no es para mí, es para la búsqueda de las abuelas. Espero que sirva para instar a los que tengan dudas sobre su identidad, que vayan y busquen”, destacó Guido, quien contó además con la presencia de su abuela (y titular de la fundación Abuelas de Plaza de Mayo) Estela de Carlotto y el presidente de River, Rodolfo D´onofrio, entre otros, quien le entregó una camiseta con el número 114 en la espalda.
EL UNO X UNO
BAROVERO (6): Espectador de lujo del encuentro. No tuvo ni una sola intervención a lo largo de los 90.
MERCADO (6): Tan solo jugo un tiempo y debió quedarse en el vestuario por una molestia. Salida como de costumbre por su lado y tranquilo en defensa como el resto de la línea del fondo.
PEZZELLA (7): Aprovechando al máximo los minutos tras la lesión de Maidana, el juvenil volvió a realizar un encuentro más que aceptable.
FUNES MORI (8): Cada día mas afianzado en la zaga central. Tiempista y atento a cada cruce, tuvo la oportunidad de marcar su gol tras una jugada en que tomó la lanza y se metió en el área. Aunque no pudo definir de buena manera. Cada vez más reconocido por los hinchas.
VANGIONI (6): Volvió tras su ausencia por Copa Sudamericana y el equipo lo notó. Salida constante por su sector, entregó el despliegue y sacrificio al que ya nos tiene acostumbrados. Aceptable encuentro del zurdo.
SÁNCHEZ (7): Otro buen partido del uruguayo que se afirma en un buen nivel. Es, por momentos, el que le da la aceleración y cambio de velocidad al equipo de mitad hacia adelante.
KRANEVITTER (8,5): El nivel del juvenil no deja de asombrar. Es el termómetro del equipo, el que maneja los hilos y tiempos. Siempre un paso adelantado al resto para cortar y anticipar, el cinco cerró otro partido ejemplar. Salió en el ST extenuado y ovacionado por todo el Monumental.
ROJAS (7,5): Gran partido del zurdo, asistiendo a Mora en el 2-0 y metiéndole el pase en el pecho a Sánchez en la jugada que derivó en el primero. Marca, distribución y sacrificio, el ex Godoy Cruz se mantiene como el socio inamovible de Kranevitter en el mediocampo.
PISCULICHI (6,5): No fue el gran partido del enganche, pero volvió a ser importante en el juego y la pelota parada sobre todo. Cada día más afianzado como el conductor de River.
MORA (9): La noche tan esperada por el uruguayo. Dos goles (el primero un golazo), sacrificio y muchas ganas sobre todo, el delantero cerró una noche soñada que solo le faltó el tercero. Sin Teo, Rodrigo fue el goleador que el equipo necesitaba en el partido. Redondo.
BOYÉ (6): Buenos minutos del juvenil. Movedizo y potente, fue una molestia constante para la defensa de Tigre. Estuvo cerca de marcar su segundo gol en el campeonato con un gran cabezazo que García sacó de gran manera al córner.
SOLARI (6): Ingresó en el entretiempo por Mercado y cerró un buen partido. Salida limpia por derecha, desbordó en varias oportunidades y siempre lo hizo con claridad y eficiencia.
PONZIO (4,5): Muy relegado por la enorme actualidad de Kranevitter, Leo sumó algo mas de 20 minutos que le sirven (al menos) para no perder ritmo de competencia.
DRIUSSI (4,5): Jugó 20 minutos finales y contó con un par de chances para marcar un gol. Ingresó para darle frescura a un partido definido a esa altura.
BAROVERO (6): Espectador de lujo del encuentro. No tuvo ni una sola intervención a lo largo de los 90.
MERCADO (6): Tan solo jugo un tiempo y debió quedarse en el vestuario por una molestia. Salida como de costumbre por su lado y tranquilo en defensa como el resto de la línea del fondo.
PEZZELLA (7): Aprovechando al máximo los minutos tras la lesión de Maidana, el juvenil volvió a realizar un encuentro más que aceptable.
FUNES MORI (8): Cada día mas afianzado en la zaga central. Tiempista y atento a cada cruce, tuvo la oportunidad de marcar su gol tras una jugada en que tomó la lanza y se metió en el área. Aunque no pudo definir de buena manera. Cada vez más reconocido por los hinchas.
VANGIONI (6): Volvió tras su ausencia por Copa Sudamericana y el equipo lo notó. Salida constante por su sector, entregó el despliegue y sacrificio al que ya nos tiene acostumbrados. Aceptable encuentro del zurdo.
SÁNCHEZ (7): Otro buen partido del uruguayo que se afirma en un buen nivel. Es, por momentos, el que le da la aceleración y cambio de velocidad al equipo de mitad hacia adelante.
KRANEVITTER (8,5): El nivel del juvenil no deja de asombrar. Es el termómetro del equipo, el que maneja los hilos y tiempos. Siempre un paso adelantado al resto para cortar y anticipar, el cinco cerró otro partido ejemplar. Salió en el ST extenuado y ovacionado por todo el Monumental.
ROJAS (7,5): Gran partido del zurdo, asistiendo a Mora en el 2-0 y metiéndole el pase en el pecho a Sánchez en la jugada que derivó en el primero. Marca, distribución y sacrificio, el ex Godoy Cruz se mantiene como el socio inamovible de Kranevitter en el mediocampo.
PISCULICHI (6,5): No fue el gran partido del enganche, pero volvió a ser importante en el juego y la pelota parada sobre todo. Cada día más afianzado como el conductor de River.
MORA (9): La noche tan esperada por el uruguayo. Dos goles (el primero un golazo), sacrificio y muchas ganas sobre todo, el delantero cerró una noche soñada que solo le faltó el tercero. Sin Teo, Rodrigo fue el goleador que el equipo necesitaba en el partido. Redondo.
BOYÉ (6): Buenos minutos del juvenil. Movedizo y potente, fue una molestia constante para la defensa de Tigre. Estuvo cerca de marcar su segundo gol en el campeonato con un gran cabezazo que García sacó de gran manera al córner.
SOLARI (6): Ingresó en el entretiempo por Mercado y cerró un buen partido. Salida limpia por derecha, desbordó en varias oportunidades y siempre lo hizo con claridad y eficiencia.
PONZIO (4,5): Muy relegado por la enorme actualidad de Kranevitter, Leo sumó algo mas de 20 minutos que le sirven (al menos) para no perder ritmo de competencia.
DRIUSSI (4,5): Jugó 20 minutos finales y contó con un par de chances para marcar un gol. Ingresó para darle frescura a un partido definido a esa altura.
Seguramente no brilló como en otros partidos, no lo plasmó en el resultado, pero desde el desarrollo lo de River ante Tigre fue un trabajo muy sólido.
Con decir que Barovero fue un espectador de lujo, ya que la visita no dispuso ni una chance nítida de gol a lo largo de los 90 en la tarde-noche del Monumental.
El conjunto de Gallardo dominó el juego de principio a fin, apoyado en los pilares claves durante este ciclo del DT: Matias Kraneviter (que ya no deja de sorprender a estas alturas la experiencia con la que juega los encuentros), fue una vez más el amo y patrón del medio; Ariel Rojas y Carlos Sánchez, socios del juvenil en la recuperación y generación del juego. Pisculichi, ya definitivamente asentado como el líder creativo en tres cuartos hacia adelante y Mora (que ante la ausencia de Teo), apareció como el goleador que el equipo necesitaba hoy.
Lo mejor del local se vió a partir de los 20. Ya mejor plantados en un campo demasiado mojado (los primeros cinco de juego solo se dedicaron a caerse por ambos lados), el Millonario empezó a imponer condiciones.
River dominaba la pelota y las acciones y el gol estaba al caer. Fue así que a los 33´ llegó la apertura del marcador. Luego de una jugada que contó con 17 pases consecutivos, Rojas llegó al fondo, tiro el centro atrás y Sánchez (de pecho) asistió a un Mora que con un gran zurdazo puso el 1-0. Golón del local, de lo mejor en el campeonato y con la estampa que Gallardo intenta imponer en cada partido.
Desde allí los de Núñez aceleraron un poco el juego en busca de aumentar el resultado. Contó con algunas oportunidades, pero siempre se encontro con un Javier García bien ubicado.
Por el lado de los de Victoria, poquito para destacar (por no decir nada). Plantado en su idea de esperar en mitad de campo y salir de contra, el equipo de Fabián Castro dependía demasiado de lo que pudiera generar su conductor, Lucas Wilchez.
Para la segunda parte, River liquidaría el juego a los pocos minutos. Tan solo tres les bastaron al local ponerse 2-0: tras una jugada entre Pisculichi y Rojas, el ex Godoy Cruz ubicó a Mora solo dentro del área, quien con un gran control dejó a la defensa de Tigre a contra mano y al delantero cara a cara con García, para definir con muchísima tranquilidad al palo derecho del arquero.
Baldazo de agua fría para los de Castro, que si ya veían dificil el desarrollo al finalizar el primer tiempo, con el segundo desde el vestuario ya era una tarea casi imposible.
Este tanto de Mora no solo significaba tranquilidad en el resultado, sino en el trámite del juego. El desgaste acumulado a lo largo de las fechas se empieza a sentir (Mercado no ingresó en el ST) y el 2-0 resultó un gran alivio para los de Gallardo.
River continuaba presionando en ataque, pero ya sin exigirse demasiado. El partido perdía en intensidad, y la visita se animaba (Castro saco un defensor y puso un punta mas), aunque sin mucha lucidez.
El muñeco metia mano en el equipo buscando darle descanso a algunos jugadores y sacaba a Boyé y Kranevitter (extenuado y ovacionado) para darle minutos a Driussi y Ponzio, lujos que el partido brindaba al técnico a falta de 23´.
Los minutos finales transcurrieron sin mucho mas que destacar que lo cerca de estuvo Mora de su hat-trick (una gran definicion por encima de García que lograron sacar en la línea) y la expulsión de un Martín Galmarini (ex Millonario) muy sacado, quizás por la impotencia que generaban las claras diferencias entre ambos equipos.
Victoria de River que sigue siendo el unico líder e invicto. Que continúa con un racha imbatible en el Monumental que ya llega a 14 partidos (11 triunfos) y aumentando la diferencia con el resto.
No solo en los números, sino en el juego.
jueves, 4 de septiembre de 2014
TESTAZO FINAL
Sin jugar nada bien, River sacó un importante triunfo en Mendoza ante Godoy Cruz por 1-0, correspondiente al partido de ida por la segunda fase de la Copa Sudamericana. El gol fue convertido por Pezzella a los 96´.
Seguramente el hincha Millonario no esperaba una actuación como la de esta noche en el estadio Mundialista. Por el presente del equipo y sobre todo, por el antecedente fresco del choque por torneo local en el que el equipo de Gallardo goleó en una gran actuación al Tomba por 4-0.
Godoy Cruz sabía que no podía volver a incurrir en aquellos horrores defensivos que lo llevaron a estar perdiendo 3-0 a los 15´ PT. El conjunto de Carlos Mayor tenía muy presente la actualidad del Millo y no estaba dispuesto a recibir en su casa otra paliza del visitante.
El primer tiempo fue lo mejor del partido. Con ritmo por ambos lados, y con un Tomba con la idea bien clara en como plantear el partido: por cada camiseta blanca y roja, una azul.
Godoy Cruz montó una presión hombre a hombre y así, reprimió el juego brillante que River venía desplegando a lo largo de las cinco fechas del campeonato argentino.
Los mendocinos ahogaban al Millonario, y el partido se jugaba al ritmo del local. Los primeros 45 tuvieron una dinámica que careció la segunda etapa, aunque con muy pocas situaciones de gol.
River, sin ser mejor en el desarrollo, contó sin embargo con la más clara del PT: luego de un centro desde la izquierda de Rojas, Sánchez tomó el despeje fuera del área y remató ante la buena intervención de Moyano. El rebote derivó en un Pisculichi solo que (quizás creyéndose en offside), la tiró fuera.
El equipo de Gallardo pudo adelantarse y torcer, tal vez, el rumbo de un encuentro que lo encontraba muy incómodo.
Lo más interesante de la etapa inicial, sin dudas fue el duelo Funes Mori-Ramírez. Ásperos, siempre disputando cada pelota como la última, el delantero estuvo cerca de irse expulsado por un codazo que no llegó a impactar de lleno en el rostro del Mellizo, aunque le valió la tarjeta amarilla por parte del árbitro Silvio Trucco.
Para la segunda parte, el encuentro cayó en un claro pozo. Chato, aburrido, producto de demasiadas impresiciones y de la merma en el rendimiento del local, el juego se tornó en cuanto apostaría River por el triunfo.
Godoy Cruz cedía definitivamente la iniciativa y volcó su juego únicamente a encontrar mal parado a su rival en alguna contra.
El Millonario disponía del dominio de la pelota, pero sin claridad en el tiro del final. El bajo rendimiento de jugadores como Pisculichi y Rojas (quizás por el cansancio de tantos partidos a un nivel de exigencia alto) se hacía sentir en el equipo.
Gallardo metía mano y buscando frescura con los ingresos de Tomás Martinez y Augusto Solari, aunque sin mucho éxito. Definitivamente, no era la noche de River.
A pesar de ello, el Millo era el único que buscaba y contó con la más clara (hasta ese momento) para definir el juego: un zapatazo de Pisculichi (el cual Moyano consiguió desviar) pegó en el palo, y en el rebote, Sánchez (con el arco a su merced) definió de primera afuera.
El resultado parecía no moverse. Romper el cero era una tarea casi imposible, y cuando el juego parecía irse sin goles, llegó el desequilibrio.
Tras un centro desde la izquierda de Piscu, Germán Pezzella apreció solo y estampó el 1-0 a los 96´ con un impecable cabezazo.
Premio para River por no conformarse con el empate y apostar todo en ataque.
Los jugadores de Godoy Cruz no podía creer lo que veían. Aguantaron más de 90 minutos de juego y observaban como en la última se iban con las manos vacías.
El conjunto de Gallardo se terminó llevando un triunfo importantísimo de visitante, marcando en esa condición y obligando a su rival a tener que ir a ganar en la revancha en el Monumental (jueves 18/9), ya que cualquier igualdad o triunfo de River, lo terminaría de clasificar a la siguiente fase.
El Millonario vive un dulce momento y sus hinchas, lo disfrutan.
Sin jugar nada bien, River sacó un importante triunfo en Mendoza ante Godoy Cruz por 1-0, correspondiente al partido de ida por la segunda fase de la Copa Sudamericana. El gol fue convertido por Pezzella a los 96´.
Seguramente el hincha Millonario no esperaba una actuación como la de esta noche en el estadio Mundialista. Por el presente del equipo y sobre todo, por el antecedente fresco del choque por torneo local en el que el equipo de Gallardo goleó en una gran actuación al Tomba por 4-0.
Godoy Cruz sabía que no podía volver a incurrir en aquellos horrores defensivos que lo llevaron a estar perdiendo 3-0 a los 15´ PT. El conjunto de Carlos Mayor tenía muy presente la actualidad del Millo y no estaba dispuesto a recibir en su casa otra paliza del visitante.
El primer tiempo fue lo mejor del partido. Con ritmo por ambos lados, y con un Tomba con la idea bien clara en como plantear el partido: por cada camiseta blanca y roja, una azul.
Godoy Cruz montó una presión hombre a hombre y así, reprimió el juego brillante que River venía desplegando a lo largo de las cinco fechas del campeonato argentino.
Los mendocinos ahogaban al Millonario, y el partido se jugaba al ritmo del local. Los primeros 45 tuvieron una dinámica que careció la segunda etapa, aunque con muy pocas situaciones de gol.
River, sin ser mejor en el desarrollo, contó sin embargo con la más clara del PT: luego de un centro desde la izquierda de Rojas, Sánchez tomó el despeje fuera del área y remató ante la buena intervención de Moyano. El rebote derivó en un Pisculichi solo que (quizás creyéndose en offside), la tiró fuera.
El equipo de Gallardo pudo adelantarse y torcer, tal vez, el rumbo de un encuentro que lo encontraba muy incómodo.
Lo más interesante de la etapa inicial, sin dudas fue el duelo Funes Mori-Ramírez. Ásperos, siempre disputando cada pelota como la última, el delantero estuvo cerca de irse expulsado por un codazo que no llegó a impactar de lleno en el rostro del Mellizo, aunque le valió la tarjeta amarilla por parte del árbitro Silvio Trucco.
Para la segunda parte, el encuentro cayó en un claro pozo. Chato, aburrido, producto de demasiadas impresiciones y de la merma en el rendimiento del local, el juego se tornó en cuanto apostaría River por el triunfo.
Godoy Cruz cedía definitivamente la iniciativa y volcó su juego únicamente a encontrar mal parado a su rival en alguna contra.
El Millonario disponía del dominio de la pelota, pero sin claridad en el tiro del final. El bajo rendimiento de jugadores como Pisculichi y Rojas (quizás por el cansancio de tantos partidos a un nivel de exigencia alto) se hacía sentir en el equipo.
Gallardo metía mano y buscando frescura con los ingresos de Tomás Martinez y Augusto Solari, aunque sin mucho éxito. Definitivamente, no era la noche de River.
A pesar de ello, el Millo era el único que buscaba y contó con la más clara (hasta ese momento) para definir el juego: un zapatazo de Pisculichi (el cual Moyano consiguió desviar) pegó en el palo, y en el rebote, Sánchez (con el arco a su merced) definió de primera afuera.
El resultado parecía no moverse. Romper el cero era una tarea casi imposible, y cuando el juego parecía irse sin goles, llegó el desequilibrio.
Tras un centro desde la izquierda de Piscu, Germán Pezzella apreció solo y estampó el 1-0 a los 96´ con un impecable cabezazo.
Premio para River por no conformarse con el empate y apostar todo en ataque.
Los jugadores de Godoy Cruz no podía creer lo que veían. Aguantaron más de 90 minutos de juego y observaban como en la última se iban con las manos vacías.
El conjunto de Gallardo se terminó llevando un triunfo importantísimo de visitante, marcando en esa condición y obligando a su rival a tener que ir a ganar en la revancha en el Monumental (jueves 18/9), ya que cualquier igualdad o triunfo de River, lo terminaría de clasificar a la siguiente fase.
El Millonario vive un dulce momento y sus hinchas, lo disfrutan.
lunes, 1 de septiembre de 2014
LOS 30 QUE IRÁN POR LA COPA SUDAMERICANA
1. Marcelo Barovero
2. Jonatan Maidana
3. Eder Álvarez Balanta
4. Federico Vega
5. Matías Kranevitter
6. Ramiro Funes Mori
7. Rodrigo Mora
8. Carlos Sánchez
9. Giovanni Simeone
10. Tomás Martínez
11. Osmar Ferreyra
12. Leandro Vega
13. Bruno Urribarri
14. Augusto Solari
15. Leonardo Pisculichi
16. Ariel Rojas
17. Augusto Batalla
18. Emiliano Agüero
19. Teófilo Gutiérrez
20. Germán Pezzella
21. Leonel Vangioni
22. Sebastián Driussi
23. Leonardo Ponzio
24. Emanuel Mammana
25. Gabriel Mercado
26. Julio Chiarini
27. Nicolás Rodríguez
28. Juan Kaprof
29. Lucas Boyé
30. Guido Rodríguez
2. Jonatan Maidana
3. Eder Álvarez Balanta
4. Federico Vega
5. Matías Kranevitter
6. Ramiro Funes Mori
7. Rodrigo Mora
8. Carlos Sánchez
9. Giovanni Simeone
10. Tomás Martínez
11. Osmar Ferreyra
12. Leandro Vega
13. Bruno Urribarri
14. Augusto Solari
15. Leonardo Pisculichi
16. Ariel Rojas
17. Augusto Batalla
18. Emiliano Agüero
19. Teófilo Gutiérrez
20. Germán Pezzella
21. Leonel Vangioni
22. Sebastián Driussi
23. Leonardo Ponzio
24. Emanuel Mammana
25. Gabriel Mercado
26. Julio Chiarini
27. Nicolás Rodríguez
28. Juan Kaprof
29. Lucas Boyé
30. Guido Rodríguez
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